viernes, 29 de mayo de 2015

“Los smartphones Salvarán la Ciudad”

Serie La Ciudad n° 2
SenseABLE Citys Lab.


…..

Miro un poco afuera y me detengo
La ciudad se derrumba y yo cantando
La gente que me odia y que me quiere
No me va a perdonar que me distraiga.

…..
                               Silvio Rodríguez
                               Te doy una canción

                               Álbum Mujeres (1978)

Estaba videando, gozando y sufriendo “con Silvio por los barrios de la Habana” cuando cantó esta preciosa canción tan llena de melancolía y de enorme potencia que yo la había escuchado tantas veces, y de pronto llega a esta estrofa de cuatro versos, y cual disparo certero al corazón me sacudo y caigo al suelo, incrédulo, maravillado y perplejo por la actualidad del segundo verso que hace 37 años compusiera anunciando no sólo una circunstancia particular de esa época en la Habana, sino una realidad que alude y persiste para cualquier ciudad contemporánea y con ella a la civilización de corte patriarcal que le dio origen.

Cualquier ciudadano más o menos informado y más aún los estudiosos del tema y con mayor razón los expertos, coinciden en reconocer y algunos en declarar que hay una profunda crisis en aquello que nos caracteriza: el deseo mayoritario o el hecho de habitar en alguna de las ciudades de este planeta. Y es que es una paradoja inexplicable. ¿Cómo es posible que todos aspiren a vivir o de hecho vivan en la ciudad cuando objetivamente sabemos que son como inmensos  organismos de crecimiento incontrolable y maligno, que consumen casi la totalidad de todo (alimentos, energía, recursos, materias primas, y vidas humanas) y excretan incalculables cantidades de basura, desechos contaminantes, gases de efecto invernadero, y allí donde se ubican, destruyen el ecosistema y afectan lentamente la salud de sus habitantes?

Entonces la ciudad se construye y se destruye y algunos como Silvio se desesperan y cantan; otros también cantan pero loas a la tecnología como el caso de Carlo Ratti que cree que es posible salvar a la ciudad con alta tecnología (juguetes tecnológicos como smartphones, pequeños sensores de todo tipo y otros) para hacerla más sensible y eficiente y poder reaccionar más prontamente a cualquier desborde que se produzca. Las Senseable Citys según su propuesta.

Se puede ver el programa de Redes n° 162 de "ciudadanos en Red" emitido por televisión española el 30 de junio de 2013 donde entrevistan a Carlo Ratti sobre las propuestas de ese laboratorio que el dirige en el M.I.T. (Masachuset's Institute for Tecnology) en este sitio: 
http://www.redesparalaciencia.com/8943/redes/redes-162-ciudadanos-en-red

Se trata de instalar en la ciudad una buena cantidad de sensores de todo tipo dependiendo de lo que se quiera medir, como una sala de terapia intensiva, y subir los resultados a la red para que cualquier ciudadano con su smartphone (dispositivo que se presume, todo el mundo tiene) pueda observar los signos vitales de ese monstruo que agoniza y jadea. Entonces Carlo Ratti propone al M.I.T. una serie de programas en un laboratorio que les permita testear estos dispositivos y armar con ellos una imagen 3D que reúna toda la información que cada segundo se va midiendo en una capa virtual espacializada que cubre la ciudad y nos permite visualizar el jadeo del monstruo.

LIVE Singapore!

El vídeo nos muestra esta propuesta en funcionamiento en la ciudad de Singapur donde se mide por ejemplo el consumo de energía por pequeñas áreas, o que pasa cuando llueve sobre la ciudad o, por último el destino de los containers que exporta esta república al mundo.

Es una idea fascinante. Nunca antes habíamos podido verlo. La tecnología existe y el ingenio permitirá ensamblarla para poder apreciar en el momento esa tomografía en movimiento. Una de las razones de peso fue que normalmente en las ciudades siempre ocurren disfunciones que en muy corto tiempo producen un caos. Los encargados de solucionar estas disfunciones no se enteran con la prontitud necesaria para acudir y solucionar el problema. Con este modelo que servirá tanto para las autoridades encargadas como para los usuarios moradores, transeúntes, etc., podremos reaccionar inmediatamente y estar informados “en tiempo real” de todo lo que el modelo mida.

Se trata entonces de mostrar las ciudades como un organismo vivo pero sensible y público y con ello incrementar notablemente la eficiencia de su funcionamiento y como consecuencia nos prometen un lugar más habitable del que hoy existe, más eficaz.

Rio de Janeiro ya se enroló entre las ciudades que usan estos beneficios. Es comprensible que para un visitante o un habitante de una ciudad tan intrincada y compleja tenga que recurrir a estos medios para por ejemplo saber donde está y como llegar a donde quiere ir de la forma más factible y usando el medio de transporte o la combinación más adecuada.



En el vídeo podemos ver seis ejemplos de aplicaciones para integrar una ciudad de Río de Janeiro más amable aún de lo que ya era.

¿Qué política está implícita en este planteo del M.I.T. a través de este laboratorio? Yo creo que para Ratti está claro que había que plantearse un programa muy práctico y funcional. Aprovechar la tecnología existente para mostrar y usar la información que se genere para que la ciudad, tal como está, use mejor sus recursos, sea más eficiente, y cumpla de mejor manera uno de sus propósitos: el de ser el mejor ámbito para vivir en sociedad de este modo civilizatorio que la humanidad ha escogido y que ha entrado en la decadencia final junto con el sistema económico internacional y la destrucción del planeta. Es decir ningún cambio estructural al concepto de ciudad ni al sistema que ha moldeado si fisonomía. Eso si nuestro smartphone con una nueva aplicación más, entre otras muchas.


Cada quien en su burbuja por la ciudad

Y en sus apartamentos


Hiperconectados pero sin comunicación verdadera