lunes, 14 de julio de 2014

Gesto Descolonizador: GIRAR A LA IZQUIERDA

Reloj del Congreso - Bolivia











Imagen reciente del reloj del Congreso del Estado Plurinacional.







La inversión de la posición de los números de la cara del reloj obliga al mismo a girar al otro lado. Una modificación mecánica muy simple pero que tiene un mensaje muy interesante de múltiples sentidos.

Algunas reacciones habituales se escucharon: ¡Que estupidez! No es ninguna estupidez. Se ubica entre las cosas que disparan una cantidad de significados que si los empezamos a abrir podremos recién vislumbrar si tienen o no consistencia y si son coherentes con estos tiempos de cambio en los que hemos decidido situarnos.

Ya sabemos que las maneras de medir el tiempo son una convención que todos hemos aceptado por cálculo y que sólo rige para nuestro sistema solar y desde nuestro planeta. Sin embargo también sabemos que el calendario actual que usamos no es el más exacto porque tenemos que corregirlo cada cuatro años agregándole un día a Febrero para que siga siendo útil. En todo caso el calendario maya es más exacto porque no es sólo numérico sino absolutamente sincronizado, cósmico, cíclico y lunar.

Pero ¿por qué el giro al otro lado? Podemos aceptar la explicación del canciller porque es el que le dio origen al cambio, que propone hacer rápidamente la prueba construyendo un reloj solar con un palito clavado sobre la tierra y observando a que lado gira la sombra del palito con el desplazamiento del sol. Pues ni más ni menos que como nuestro reloj actual del congreso. Tiene un movimiento levógiro, es decir que gira a la izquierda respecto de nosotros. Claro que en el hemisferio boreal del norte ocurriría lo contrario, vale decir que tendría un movimiento dextrógiro o hacia la derecha.

El tema de la dirección del giro en la naturaleza y el cosmos me estuvo inquietando desde hace varios años. Me pregunté si los fenómenos tendrán una sola dirección cuando giran o tendrán una dirección preferencial o mayoritaria. Para responder estuve recogiendo algunos ejemplos y llegué a una conclusión de la sola observación. Parece y digo parece porque no puedo estar seguro, que los fenómenos de la naturaleza tienen la preferencia o la tendencia de moverse en levógiro o a la izquierda.

Veamos algunos ejemplos.
Arquímedes en la bañera

Después que Arquímedes de Siracusa profirió el emblemático grito de "eureka", destapó la bañera y no se fijó, por la prisa de anotar el descubrimiento, que el agua inmediatamente empezó a vaciarse por el sumidero girando a la izquierda. Es que cuando el agua tiene que elegir a que lado girar para formar el embudo en la boca del desagüe elige girar a la izquierda salvo que haya algún impedimento físico que la haga girar al otro lado para vaciarse.

Las aguas en general en este mundo, aunque aparenten estar totalmente tranquilas y quietas están en un equilibrio relativo porque se encuentran en un sistema mayor que está girando de este a oeste y éste a su vez girando alrededor del sol y todavía, todo el sistema en la vía láctea y todo el universo expandiéndose a una velocidad tal, que a cualquiera le daría vértigo si se pone a pensarlo.

Huracán desde el satélite
Otro ejemplo son los ciclones, remolinos y huracanes cuyas imágenes las podemos apreciar recién desde más arriba gracias a los satélites que han registrado estos fenómenos colosales que al girar van arrastrando todo hacia el cono central y extienden sus brazos hacia afuera en una línea curva espiral que tiene que ver con la proporción áurea y las series de Fibonaci para su construcción geométrica.

Galaxia espiral con brazos
Naturalmente que el punto de vista es importante porque aquí como en la bañera vemos el fenómeno desde arriba. Es que no es usual verlo desde abajo. Pero estamos llegando al límite de las posibles ubicaciones de los puntos de vista, porque en el espacio exterior ya es imposible determinar que es arriba y que abajo y menos donde es izquierdo o derecha. Sin embargo, cuando se han retratado galaxias desde la Tierra han mostrado el mismo sentido de giro como se ve en la imagen.

Allí ya empiezan a aparecen ejemplos que giran en sentido contrario es decir de movimientos dextrógiros también. Es que allá afuera ya no tiene sentido ni pensar ni hablar de sentido de giro. O tal vez sea mejor decir como en la teoría de la relatividad que todo está en función del observador y de la velocidad a la que se desplazan tanto el objeto como el sujeto y entre sí. Es que desde el rinconcito del universo donde la Tierra se halla ubicada vemos unas galaxias desde "arriba" y otras desde "abajo" y por eso ya no podemos decidir en que sentido giran.

Mientras le iba dando forma a esta primera parte pude ver este vídeo que muestra precisamente la misma idea que está implícita en lo que escribía con el añadido que se pueden ver imágenes  de giros a la izquierda que me interesaba colocar en esta entrada. Y otra cosa más. La colección que se presenta en ese sitio que titula Here, There and Everywhere, fue tomada de una canción de Los Beatles y rescata aquella sentencia antigua de sabiduría que en uno de sus principios declara que, "así como es arriba es abajo" y viceversa que aparece en el Kybalion y se atribuye a Hermes Trismegisto.

Podemos todavía observar una imagen de un agujero negro que por efecto de la gravedad hace que todo lo que engulle se coloque girando a su alrededor para ingresar tangencialmente por el hoyo (podemos decir) "hacia abajo" en lenguaje terrestre y, también gira a la izquierda.

Agujero Negro
En la naturaleza aparte de estos ejemplos en movimiento ya citados encontramos ejemplos que se pueden explicar en la medida en que corresponden a lineas geométricas como espirales de varios tipos o dobles espirales que son representaciones congeladas de otro tipo de movimiento como el crecimiento o desarrollo que tuvieron o la huella que dejó este movimiento. Esto ocurre en plantas y animales.

Algunos ejemplos de ello son los girasoles, el Nautilus, la acomodación de los pétalos de una rosa, la piña de un abeto, las margaritas, etc.






Pero aquí nadie puede decir nada en relación a la dirección del giro porque no hay movimiento efectivo, por tanto no hay ni dirección ni sentido de giro. Hace falta algo que está más allá del objeto mismo, algo externo a él algo que le rodea, donde aparece, en que medio se inserta. Donde sucede ese algo para que podamos asignarle un sentido, algo así como el contexto. porque ya sabemos que son los contextos lo que le otorgan sentido a las cosas.

En las representaciones artísticas se ha usado esta curva espiral adquiriendo un significado de acuerdo a cada obra. Tenemos algunos ejemplos recogidos al azar mientras buscábamos imágenes con espirales y que muestro a continuación:







Más allá del significado que adquiera esta curva en cada obra pude constatar un hecho interesante. Como la aparición de esta curva en las obras ha sido una decisión del artista, él ha decidido usarla y representarla de la manera que vemos y en el sentido que se muestra y lo que pude advertir inmediatamente es que existe una amplia mayoría de ellos (no todos, claro está) que la representan girando a la izquierda. Puede ser concientemente como decisión deliberada pero prefiero creer que no lo es. Si fuera así como creo, me muestra indudablemente que se trata de la sensibilidad del artista que captó de inmediato que en la naturaleza esta curva se presenta preferentemente de este modo, girando hacia la izquierda.

Pero, ¿por qué a la izquierda? En el contexto de la historia de las ideas religiosas y políticas   encontramos representaciones de signos y símbolos que tienen un componente direccional.

Pero aquí el criterio de análisis es otro.

"Sentarse a la diestra de Dios", Marcos 16:19. Si Dios se coloca en el centro, la jerarquía inmediata que le sigue es a la derecha del personaje principal aunque nosotros lo veamos a su izquierda. En el siguiente nivel viene el lugar de la izquierda y así sucesivamente. Este criterio de distribución de las jerarquías ha influido y perdurado en un sinfín de contextos para ordenar lugares de sucesión y hacer que la lectura de esos órdenes sea más clara y legible de manera inmediata. Ha logrado imponer un modelo de orden jerárquico que va incluso hasta el nivel familiar y doméstico, y como está basado en la preeminencia del sexo masculino, nos ha legado una concepción patriarcal, machista y reaccionaria de la que no nos podemos librar tan fácilmente.

En el contexto de las ideas políticas pasa otro tanto. La caracterización de izquierda/derecha para la dirección que toman las ideas políticas, que hoy vuelve al escenario político en los medios, tuvo su origen en la revolución francesa en la asamblea constituyente que, tuvo que ordenar a los participantes en dos sectores. A la derecha de la cabeza para aquellos que querían restablecer y conservar el orden monárquico anterior. Y a la izquierda para aquellos que propugnaban la instauración de la república como nuevo orden. Entonces se trata de lugares ordenados de acuerdo a la testera, independiente desde donde se lo mire y que determina una caracterización en básicamente dos grupos de ideologías: aquellas revolucionarias, progresistas y avanzadas hacia la izquierda y las conservadoras y reaccionarias hacia la derecha. A partir de entonces, todas las propuestas políticas que ocurrieron en la historia se las clasificó con ese esquema. Demás está decir que en el transcurso apareció una postura intermedia de carácter conciliadora que se caracterizó como de centro y todas las combinaciones de este sistema que poco a poco empezó a convertirse en inutilizable por la complejidad en la clasificación que las posturas actuales le demandan a este esquema.

De todas formas, el acto de crear un orden como el esquema anterior y tratar de encajar la realidad a toda costa en el esquema izquierda/derecha o izquierda/centro/derecha y sus combinaciones tanto para sentarse como para clasificar las ideas políticas cuanto para organizar un cuadro religioso es sin lugar a dudas, en sí mismo, un acto reaccionario y quizás lo mejor es no gastar tanta tinta en esto y dejar que los análisis salgan libres de esquemas preconcebidos, porque eso si constituye un verdadero acto descolonizador.

En resumidas cuentas lo único que es rescatable de este acto valiente de hacer girar el reloj en sentido contrario es que gira a la izquierda y el levógiro está en consonancia con la naturaleza. Ahora el hecho que sea a la izquierda para mi, además tiene un sentido revolucionario con el que es posible contribuir al cambio del orden establecido, es consistente con los actos revolucionarios de un proceso que contribuye a cambiar la realidad y es coherente con la concepción general que anima este proceso.

martes, 21 de enero de 2014

Al fin y al cabo, ¿DE QUÉ SE TRATA?

A Propósito de la Película: El Artista y la Modelo de Fernando Trueba

En cuanto me enteré de la última película de Fernando Trueba “El Artista y la Modelo” la busqué hasta poder verla. Es que sabía de antemano que me iba a iluminar sobre algo, aunque no sabía bien, sobre qué hasta no verla.

Es difícil escribir sobre algo tan bellamente delicado y profundo. Uno corre el riesgo de repetir o, de no decir nada. Lo que me deja el deleite de la película, entre muchas otras cosas es, un recordatorio en su sencillez, que es necesario tratar en la vida de encontrar una idea, por lo menos, que poder comunicar a través de la actividad que uno realice.

Al parecer la vida no tiene un propósito, pero frente al desafío de estar aquí y vivirla hay que hacer algo. Entonces se trata del hacer que supone un saber. Pero para saber-hacer hay que vivir. Ahí está el problema. ¿Qué podemos decir del saber vivir si todavía no hemos acabado de vivir?

Por un lado está la precedencia y preeminencia del saber para vivir que, sin embargo, no invalida en absoluto la vida ni la experiencia  del vivir. Por otro lado está el vivir como condición del saber aceptando que cualquier experiencia del vivir nos dejará algún saber. Estamos frente a un bucle recursivo de aquellos que comprendió muy bien Edgar Morin:         vivir para saber, así como, saber para vivir.

Cuando el vivir se cualifica, aparecen cualidades que lo orientan en un rumbo, en una dirección. Entonces el hacer-viviendo se vuelve político, una praxis, una ideología. Despliega una suerte de necesidad de coherencia y regreso al rumbo trazado y aceptado. Por más chueco o zigzagueante que sea el devenir, es unidireccional pero diverso en sus modos. 

“Vivir mejor” fue la consigna en otro tiempo. Está demás decir hacia donde nos lleva esto. Hoy creemos en el “vivir bien” que es más democrático, austero, respetuoso y sustentable para todos.

Cuando ese vivir descubre el arte, incorpora otra dimensión. La de la expresión, del decir algo, la de la comunicación con el Otro, con otros, con el común, la de trascender el tiempo de una vida. Lo tras-temporal, lo intemporal.


Cuadros y diálogos no textuales de la película


-          Por eso mismo hace falta tener una idea. Tienes que encontrar la idea. Si no pierdes el tiempo nada más.
-          ¿Cómo hace para encontrar una idea?
-          Si lo supiera...



-          ¡Pero esto ni se parece a mí !!!
-          Nadie dijo que se parecería. No es una copia. No es un retrato. Si uno copia, tiene que parecerse. Pero si uno tiene una idea y quiere comunicarla, entonces es otra cosa. Como decía mi amigo Sesson "es para consultar con la naturaleza".



-          Mira, voy a contarte dos pruebas de la existencia de Dios. El Génesis y todo eso son bobadas. La primera es el cuerpo de la mujer. ¿Puedes imaginarte a Dios creando al hombre?

Ella mueve la cabeza negativamente.

-          Tampoco hay que tomar a Dios por idiota. Primero creó los cielos, creó la tierra. Creó los océanos, los mares, los manantiales (Paqarinas en aymara) y los ríos. Creó las plantas, creó los animales, los pájaros, los peces. Toda esa belleza. El Paraíso. Entonces pensó en crear un ser, para él. Un ser bello, perfecto con quien compartir el mundo. Un ser que le hiciese compañía en la eternidad, interminable. Y, seguramente,... alguien a quien poder abrazar en invierno y acariciar la piel en verano.
Y creó a la mujer. La llamó Eva.

-          ¿Y entonces Adán?

-          Espera. Entonces Dios Y Eva tuvieron un hijo. Le llamaron Adán. Dios sólo prohibió una cosa: le prohibió a Adán que se acostara con su madre. Pero los sorprendió... Los encontró en plena... en fin que los sorprendió. Ese fue el Pecado Original.
Por eso Dios nos abandonó. Y se dio cuenta que no podía contar con nosotros. Se dio cuenta de que no éramos dignos de su confianza. Entonces nos expulsó del Paraíso.

-          Y por eso ¿sólo hace mujeres desnudas?

-          Si, seguramente. Los hombres no somos más que un accidente, un accesorio. Pero la mujer es la forma primera, la forma esencial.

-          Entonces yo soy Eva. Y con todo desparpajo le dio un buen mordisco a una manzana y se rió.
-          Pero mujer, no has entendido nada.

-          ¿Y la segunda prueba?

-          Es el aceite de Oliva. Ja, ja, ja.